Ya estamos de nuevo con una nueva entrada, en los últimos años el uso de la secadora para ropa ha ido progresivamente en aumento. Cada vez son más los hogares que tienen este tipo de electrodoméstico. Si tienes dudas o te planteas la compra de una secadora de evacuación o condensación y no sabes cual elegir, en eTendencias te resolvemos las dudas:
Secadora de evacuación
El funcionamiento de una secadora de evacuación es sencillo. Toma aire del exterior y este pasa a través de unas resistencias que lo calientan. Una vez caliente, el aire se introduce en el interior del tambor donde se encuentra la ropa mojada, se carga de humedad y se expulsa al exterior a través de un tubo. Para instalar este tipo de secadoras es necesario que haya una salida al exterior donde poder colocar el tubo de expulsión del aire húmedo.
Por otra parte el principal inconveniente es que las secadoras de evacuación necesitan una salida al exterior, por lo que no se pueden instalar en cualquier hueco de tu hogar.
Secadora de condensación
en las secadoras de condensación el aire se calienta a través de una resistencia eléctrica y se convierte en vapor de agua que cuando se enfría el agua se recoge en un deposito, que hay que vaciar periódicamente. Algunas secadoras de este tipo ofrecen la posibilidad de sustituir el deposito de agua por la opción desagüe que se puede conectar a la salida de agua de la lavadora, evitando de esta manera el tener que vaciar constantemente el depósito del agua. Claro que si elegimos esta última opción no podremos colocar la secadora donde queramos ya que dependeremos de donde se encuentre la salida del agua.
Estas secadoras no requieren de una salida de aire a diferencia que los modelos de evacuación. Por lo que las secadoras de condensación con su propio depósito de agua se podrá colocar en cualquier espacio de tu hogar, ofreciendo una instalación mucho más sencilla. Por ello, son las más demandadas del mercado junto a las secadoras de bomba de calor.
¿Cuál consume menos?
Decirte que las secadoras de condensación son más eficientes energéticamente hablando gracias a su sofisticada tecnología y, aunque suelen tener un precio bastante asequible, si bien es cierto que suelen ser más caras que las de evacuación