Bienvenidos de nuevo Etendencieros, en este nuevo blog os traemos 5 trucos para mantener frescos los alimentos en verano y evitar desperdicios de comida en las épocas de calor. Cuando el calor del periodo de verano llega, nuestros alimentos corren el riesgo de estropearse más rápidamente si no tomamos las precauciones adecuadas. Es importante conocer algunos trucos prácticos para proteger nuestros alimentos y garantizar que se mantengan frescos y seguros durante las altas temperaturas. En este blog, compartiré contigo cinco consejos efectivos para evitar que tus alimentos se estropeen debido al calor. ¡Sigue leyendo y descubre cómo proteger tus alimentos y reducir el desperdicio!
1. Almacenamiento adecuado
Durante el calor, es fundamental encontrar un lugar fresco para almacenar tus alimentos. Evita dejarlos expuestos al sol directo o cerca de fuentes de calor, como electrodomésticos o estufas. Busca un área fresca de tu hogar, como una despensa o un armario alejado de la luz solar directa, para guardar tus alimentos y prolongar su vida útil. Etiqueta y ordena tus productos para que los más antiguos se utilicen primer
Asegúrate de almacenar los alimentos perecederos, como carnes, lácteos y productos frescos, en el refrigerador a una temperatura adecuada. De esta manera, podrás consumirlos a tiempo y reducir el riesgo de que se echen a perder.
2.Oganización del frigorífico
Mantener tu refrigerador organizado y con una temperatura adecuada puede marcar la diferencia en la vida útil de tus alimentos. La temperatura en el interior de cualquier frigorífico debe estar en torno a los 4ºC o 5ºC, dependiendo de la cantidad de alimentos que introducimos en este. En caso de que el frigorífico se encuentre vació deberíamos aumentar la temperatura hasta los 8ºC, y en caso contrario es decir, que se encuentre lleno debemos reducir algún grado para equilibrar.
Hay que tener en cuenta, que todas las zonas interiores del frigorífico reciben la misma temperatura. Por ejemplo, la puerta es el lugar menos frio de todo el frigorífico debido a que a la hora de abrirlo está mas expuesta a la temperatura exterior. Por otro lado, los estantes inferiores son los más fríos y a medida que vamos subiendo se va aumentando la temperatura.
3. Utiliza recipientes herméticos
Los recipientes herméticos son tus mejores aliados para mantener los alimentos protegidos de la humedad y los insectos. Almacena tus alimentos en recipientes herméticos de plástico o vidrio para evitar la entrada de aire y mantener la frescura por más tiempo. Además, estos recipientes te permiten apilar los alimentos de manera eficiente, ahorrando espacio en tu despensa o frigorífico.
4. Evita dejar alimentos fuera del frigorífico por mucho tiempo
Durante el verano, evita dejar los alimentos fuera del refrigerador por mucho tiempo, especialmente aquellos que son altamente perecederos, como los productos lácteos y las carnes. Planifica tus comidas para que los alimentos estén fuera del refrigerador el menor tiempo posible y consúmelos rápidamente para evitar que se estropeen. Evita también dejar la fruta fuera del frigorífico para que no se estropee.
5. Considera opciones de almacenamiento en seco
Además de los alimentos perecederos, también es importante proteger los alimentos secos de la humedad y el calor. Asegúrate de almacenar los productos secos, como cereales, harinas y especias, en recipientes herméticos para evitar la absorción de humedad y la proliferación de insectos. Guarda estos alimentos en un lugar fresco y seco, lejos de la luz solar directa.
En conclusión, las altas temperaturas pueden ser un desafío para la conservación de los alimentos, pero con estos trucos prácticos, podrás evitar que se estropeen. Recuerda el almacenamiento adecuado, la organización del refrigerador, el uso de recipientes herméticos, evitar la exposición de los alimentos y la consideración de almacenar productos en seco, te ayudarán a mantener tus alimentos frescos y seguros incluso en los días más calurosos del verano. ¡Disfruta de tus comidas y evita el desperdicio de alimentos!
